La locura está servida: Llega el señor que mata toros (Eso sí, con mucho arte), y la plaza de toros se convierte en el centro del universo. Toda su circunferencia se llena de "Prohibidos parar" y los, supongo que empresarios, por los coches que se gastan, aparcan encima de la acera ocupando el espacio reservado para los peatones. Eso sí, este sábado no se te ocurra dejar el coche a partir de las 8 de la mañana en los alrededores de la plaza, corres el peligro de que la policía municipal te cambie de sitio tu vehículo y es que llegan las televisiones, los toreros, los toros... y hay que dejarles sitio. Y mientras, en el resto de la ciudad, coches encima de las aceras, turismos en carga y descarga, coches en los pasos de peatones. ¿Y si no te gustan los toros? Pues más gracia te va a hacer si te desaparece el coche. Claro, acostumbrado a aparcar donde las señales te indican que no lo hagas, no entiendes por que está vez sí se hace cumplir la ley. Tolerancia amigos, mucha tolerancia.
No hagáis como los que mancharon la fachada de la plaza de toros con rojo y amarillo, que desalmados, utilizar nuestros colores patrios:
Menos mal que a las pocas horas ya había personal de limpieza manos a la obra, borrando la palabra "Asesinos"; que bárbaros llamarle eso a semejantes artistas en el "arte de matar". En fin, que a veces las cosas funcionan... digo por lo de "circus", lo de "pan" ya es otro cantar... o comer. Por cierto, ¿Os habéis fijado cuanta gente viendo como trabaja el operario? 
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